Diana Cazadora

Para Fernando, el protagonista, Adriana resulta exuberantemente bella aunque con un aire provinciano. Desde el primer momento que la ve siente lo que ninguna mujer ha despertado en él. Adriana, que en realidad es una joven ansiosa de poder, buscando superar su pasado miserable, ve en Fernando y su caudalosa fortuna la posibilidad de superarse. El único impedimento para apoderarse del dinero es Alejandro, hermano del protagonista. Adriana, convertida luego en Diana, sumirá a Fernando en un mundo oscuro, bajo y turbio, de donde ni Alejandro ni nadie lo podrán sacar jamás, salvo la muerte.